¿POR QUÉ NO SER MÁS FELIZ?
Pues creo que... la primera respuesta a esta pregunta es otra pregunta:
¿Qué necesitamos para ser felices?
¿Qué cosas quisieramos tener para experimentar felicidad?,
¿Qué personas necesitamos tener a nuestro lado para sentirnos felices?,
¿Qué circunstancias tendríamos que cambien para ser felices?
Hay personas que nunca se sienten realizadas.
Ellas van por este hermoso mundo corriendo desesperadas como un niño que afanado persigue el arco iris.
Muchas cosas le fastidian y le molestan.
A pesar del serio esfuerzo del niño y su intento de acercarse, el arco iris parece burlonamente alejarse.
Para esas personas, la felicidad siempre está más allá de donde ellqs se encuentran.
Hay quienes dicen: “Me casaré cuando encuentre la persona que traiga satisfacción a mi vida”.
La filosofía de vida de estas personas es: “cuando encuentre a mi cónyuge, entonces seré feliz”
Y también hay quienes ya han encontrado pareja y como ya se han decepcionado, piensan: "cuando me separe, entonces seré feliz"
Lo mismo hay gente que piensa: “cuando tenga hijos seré feliz y otros, cuando se marchen, entonces comenzará mi felicidad”
La vida no funciona así.
Podrás tener riquezas y ser infeliz, estar rodeado de las personas más amorosas y vivir las circunstancias ideales, …pero eso no quitará de ti todos tus males.
Porque es que la felicidad no se descubre al encontrar a la persona apropiada, … sino en ser la persona adecuada.
La felicidad no está en encontrar a quien te haga feliz, … sino en aprender a traer felicidad a los que te rodean.
La felicidad la encuentra la persona que aprende a vivir sabiamente.
Lo ideal es establecer relaciones saludables, poner límites, aceptar lo bueno y rechaza lo cuestionable.
Es feliz quien se acerca a las personas sin sospecha pero con prudencia y se aleja de quienes le hacen daño, sin maltratar pero con inteligencia.
La felicidad la encuentra quien aprende a usar las cosas y no a las personas, quien no abusa ni permite el abuso.
No es feliz quien nunca recibe heridas sino quien sabe cómo evitarlas y, cuándo es imposible, sabe cómo curarlas.
No es feliz quien nunca tiene problemas o todo lo tiene resuelto,… sino quien, cuando estos llegan, los enfrenta sabiamente y cuando no puede, busca ayuda inmediatamente.
Por nuestro propio bien, dejemos de buscar la felicidad en las cosas, personas o circunstancias que nos rodean y comencemos a cambiar desde nuestro interior, las actitudes que nos están afectando.